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viernes, 12 de septiembre de 2008

BREVE NOCIÓN ESTÉTICA E IDEOLÓGICA


El trascendentalismo corresponde a una experiencia estética que busca la revelación de lo metafísico del ser humano, por medio del lenguaje poético, en medio de un mundo cada vez más desacralizado. Es conveniente aclarar que el uso del concepto "trascendental" no representa precisamente una preocupación metafísica u ontológica; ello sería adaptar la poesía a los valores y medios particulares de la filosofía. El concepto trascendental no parte en la poesía de la especulación, propia de la filosofía, sino de la vivencia trascendental conseguida a partir de la forma del poema para llegar al lector.

El trascendentalismo nace como movimiento literario en Costa Rica a partir de la publicación del Manifiesto Trascendentalista, en 1977. Sus autores Laureano Albán, Julieta Dobles, Carlos Francisco Monge y Ronald Bonilla concibieron una poética cuyo fin es ultraliterario: Incorporarse al ser, trascender la estructura literaria y convertir el poema en vivencia trascendental para llegar al lector.

Desde mi poética y relectura del Manifiesto Trascendentalista, considero que la liberación de todo espacio interior se logra por medio de la poesía, por medio de la inevitable revelación alcanzada entre la intuición trascendental con que el poema acoge, desapercibida, la experiencia del otro y la liberación expresiva del lenguaje. En el lenguaje coloquial, la metáfora manifiesta una presencia constante. Esto se debe a que, en ocasiones, resulta imposible no usarla, porque la metáfora siempre obedece a la ineludible necesidad de expresar cuanto no posee equivalente en el lenguaje directo y conceptual. En fin, la poesía, dijo Federico García Lorca, se defiende con dificultad de la inteligencia. La poesía ha trocado en sus mejores instantes la indefectible fenomenología de lo racional por el sentido mayor de todo ser: el misterio. En un esfuerzo por superar las cárceles comunes del lenguaje, muchos se han perdido. Esta es la primera trasgresión del poeta.

Lo trascendental compréndase como una actitud a partir de la experiencia vital del ser humano, una resignificación del mundo, un cambio íntimo a partir de una experiencia estética, donde el lenguaje, en tanto mostración reveltiva, provoca en el lector lo conocido por los antiguos griegos como el thauma: el sentido de nulidad, éxtasis o descubrimiento frente a la revelación de lo hierático, lo metafísico y vivencial permanente en el ser humano. Es decir, en tanto el lector experimente, a través del poema, una anagnórisis (un reconocimiento) de su condición cósmica y sagrada, habrá alcanzado, entonces, su infinita sustancialidad el poema. Esta es la segunda trasgresión del poeta.

Hörderling dijo: "Es poéticamente como el hombre habita la tierra." Este tan sólo es un esbozo de un paradigma, más que personal, el de un grupo unido por el mismo. Nuestro ideal muy pocas veces ha sido comprendido como tal: "La poesía es la verdad de las almas despiertas."

¿Conocía usted sobre la poesía trascendentalista costarricense?

¿Cómo califica la poesía trasdendentalista de Ronald Campos?

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